Detention (Fan xiao – 2019)

En 2017, la desarrolladora taiwanesa llamada Red Candle Games desembarcaba en Steam con un videojuego muy particular llamado Detention. Con una vista lateral, este juego en 2D recordaba a otros como Lone Survivor (2012), Claire (2014) o Distraint (2015), pero influenciado directamente por las costumbres de su país, así como también de su religión y mitología. Muchos decían que era el “Silent Hill taiwanes”, sobre todo desde el aspecto narrativo. Detention es un gran videojuego, con grandes climas y una visión sobre el terror que nace desde las entrañas de un contexto político y social que toca de cerca a varias sociedades que aun mantienen las venas expuestas para no dejar de recordar esas atrocidades que han dejado huella.
El éxito del juego fue tal, que no tardó en salir una novela basada en la historia del mismo, y más tarde una película, que es la que nos reúne en esta reseña. La cinta se sitúa en 1962 durante lo que se conoció como el Terror Blanco de Taiwán, una dictadura que duró muchísimos años y en la cual se asesinaron a muchísimos taiwaneses por estar en contra de la ley marcial que regía aquella actualidad, portar libros de izquierda, comunistas, o generar reuniones donde se manifiesten diferentes temáticas que el Partido Nacionalista Chino consideraba prohibidas. Detention adaptación cinematográfica, al igual que el videojuego, cuenta la historia de unos jóvenes idealistas, que en medio del horror político y social, conocen a aquellos fantasmas y demonios sin voz que quieren ser escuchados.
Visualmente, tiene un compromiso muy aferrado al videojuego. Si bien no se puede comparar a ambas propuestas porque son diferentes medios y formatos, el director John Hsu se encarga de homenajear, por así decirlo, a la obra de Red Candle Games. La fotografía desgastada, opaca, la poca luz, algunas escenas que replican la vista lateral y en 2D del juego, el uso de velas para iluminar constantemente. Los recuerdos que acechan como fantasmas esclavos de una época infame recuerdan mucho al concepto de los enemigos de Silent Hill y su carga emocional, y quizás esto sea algo que se nota mucho más en la versión cinematográfica. Quizás sea por la libertad a la hora de plasmarlo, pero realmente se siente ese peso implícito de la narrativa buscando todo el tiempo contar una historia sin dejar de imprimir terror en cada una de sus escenas.
Dicho esto, Detention es una gran adaptación y sabemos lo difícil que es encontrar algo así. Para quienes sean asiduos en el gaming, podría poner al excelente Layers of Fear como parámetro de lo que esta cinta tiene entre manos. Ese pregonar onírico tan intenso, con escenas que visualmente explican todo y no necesitan mucho diálogo para comunicar. El salto entre ideas, la mezcla de conceptos, siempre manteniendo el mismo tono, el mismo suspenso, los mismos climas aberrantes. El sonido como un palpitar maldito. Para quienes por el contrario, no sepan qué es Layers of Fear, esta película es complicada de catalogar. Hace muy bien lo que tiene que hacer y no se despega de la premisa de ser la adaptación de un videojuego. Podría nombrar películas como La cité des enfants perdus (1995) de Marc Caro y Jean-Pierre Jeunet; o las escenas dentro de la mente del asesino en The Cell (2000), dirigida por Tarsem Singh; o incluso Altered States (1980) de Ken Russell, pero con ninguno de estos ejemplos podría describir a esta producción taiwanesa.
Y espero no se me malinterprete. No estoy diciendo que Detention sea parecida o mejor que estas películas recién nombradas. Lo que intento hacer es tratar de interpretar de forma descriptiva lo que la película intenta mostrar. La mejor forma de hacerlo es afirmar -sin miedo alguno- que estamos frente a algo que mezcla el concepto del terror de Silent Hill con lo visualmente onírico y aterrador de Layers of Fear, con una destreza cinematográfica impecable, pero sería volver al mundo de los videojuegos. Detention es fantasía pura librada hacia el horror, es como meterse en la mente de los personajes perturbados de esta película y experimentar su propio infierno, con sus culpas, sus miedos y sus pesares, todo eso dentro del marco histórico que mencioné en un principio.
En lo personal, siento que uno de los puntos más fuertes de esta película recae en que todo el terror nace desde la eliminación de la esperanza. Genera un contraste inmenso entre la luz y la oscuridad. Cuando la bondad, el amor y la pasión de la rebelión se quiebran, la sangre derramada tiene gusto a miedo, a temor, a espanto. En ese aspecto, es la perfecta metáfora que aferra sus raíces a eso de que “la oscuridad es la ausencia de la luz”, y cuando todo se torna negro, en esta película no hay nada que brille a lo lejos. La narrativa, el ritmo y su dinámica, el guión y todos sus giros, son elementos que realmente vale la pena experimentar. Quizás para quienes jugaron a los videojuegos algunas cosas no tengan tanto peso ni factor sorpresa, pero si quitamos eso de lado, creo que estamos frente a una gran adaptación que pasó sin pena ni gloria y que, sin duda alguna, merece mucho más de lo que obtuvo.
Me gustaría destacar nuevamente el trabajo que tiene Detention a nivel visual. La atención a los detalles es fantástica, creando constantemente espacios lúgubres y con una dirección creativa y de arte increíbles. Hay decenas de encuadres con una construcción impecable, la puesta de las cámaras, la composición, lo impactante que resulta la búsqueda a nivel comunicacional. Hay frames que se vuelven fondos de pantalla perturbadores, fotografías de la demencia más absoluta, enalteciendo la cinematografía pero sin abandonar la idea de que todo nace de un videojuego. Y por algo la película ha sido nominada varias veces y ha ganado varios premios, incluyendo Best Visual Effects (2020 14th Asian Film Awards), Best Art Design, Best Narrative Feature y Grand Prize (2020 Taipei Film Awards), o Best New Director, Best Adapted Screenplay, Best Visual Effects y Best Art Direction (2019 56th Golden Horse Awards), entre tantos otros.
Una persona puede perder muchas cosas, despojarse de tantas otras, pero el día en el que renunciamos a los ideales que nos forman, es cuando nos quedamos sin nada, cuando dejamos de ser seres humanos. Esta hermosa adaptación, así como el videojuego en el que se basa, no sólo son grandes exponentes del terror, sino que también se encargan de dejar un mirada tácita sobre la abominación social y política de aquellos años donde la libertad de los individuos estaba aplacada por un régimen que termina siendo el verdadero monstruo de esta historia. Detention y su director brillan en todos los aspectos posibles, regalando una mirada agría con tintes tenebrosos en grandes dosis. La fantasía y la creatividad al servicio de quienes amamos este género.