Ajin

Katsuyuki Motohiro no es un improvisado. Quizás no tenga el renombre de otros directores provenientes del país del sol naciente, pero el hombre ya tiene a cuestas más de 30 años de carrera ininterrumpida, habiendo pasado por todos los géneros y formatos. Dirigió películas, series, anime, y siempre se mantuvo activo en la materia. Por eso mismo, los primeros 20 minutos de Ajin (conocida también como Ajin: Demi-Human) marcan el ritmo y el tono de lo que estamos por ver sin titubear. Basada en el manga homónimo creado por Gamon Sakurai y Tsuina Miura, esta película nos muestra en apenas algunas escenas, una dosis de acción, artes marciales y coreografías realmente impresionantes, que van a ser el motor de todo lo que viene a continuación.

La premisa es simple, y se nota sobremanera la impronta que suelen tener las historias de este país, cargadas de emocionalidad. En el mundo existen unos seres a quienes llaman Ajin. Son inmortales y los gobiernos los capturan para hacer pruebas secretas. En Japón, luego de un accidente, descubren al tercer Ajin. Lo capturan, lo llevan a un establecimiento especial y le comienzan a hacer pruebas, tales como amputar extremidades, asesinarlo y ver cómo se recupera y vuelve a la vida. Pero Kei Nagai, nuestro protagonista, solo quería vivir una vida normal. Él era un simple estudiante que deseaba vivir una vida como cualquier otro, hasta que el destino lo puso en esta situación particular, donde se ve obligado a escapar para realmente ser libre.

Ajin (2017) | Dirección: Katsuyuki Motohiro

Si pensamos en los X-Men, tenemos un grupo de personas diferentes que son miradas con mala cara por la sociedad. Las autoridades reniegan de ellos mientras que lo único que ellos quieren es poder vivir libres y tranquilos. Sin embargo, estos seres “diferentes” no son todos iguales: hay quienes buscan el cambio mediante el diálogo y la comprensión, y otros que no tienen reparo a la hora de recurrir a la violencia para alcanzar sus objetivos porque de alguna manera, reniegan del trato que recibieron por ser como son. Si todos los mutantes fueran buenos, no existiría punto de inflexión, no existiría el conflicto. Y si todos fueran malos, no existiría quién los detenga, ya que sus poderes los alejan de los humanos en cuanto a la fuerza y el poder. Narrativamente se necesitan, no podría existir el uno sin el otro.

En Ajin pasa algo muy similar. Estos seres tienen diferentes búsquedas siendo parte de lo mismo. Unos utilizan sus poderes para ganar terreno, y otros solo para defenderse. Se le da paso al concepto del uso responsable de la fuerza mediante la dicotomía del bien contra el mal. Los motivos de cada uno son válidos, dependiendo con la vara que se midan, y están muy bien plasmados a nivel narrativo. Se nos permite, como espectadores, poder entender los motivos de cada uno. ¿Por qué hacen lo que hacen? ¿Se justifica la manera de hacerlo? Todas estas son preguntas que van haciéndose parte de la estructura del guión, separando a ambos bandos.

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Al estar basada en un manga que abraza la historia que comenté más arriba, hay que estar preparados para aceptar el verosímil. Generalmente, este tipo de adaptaciones te proponen aceptar un montón de reglas que, según nuestros gustos y elecciones, podríamos no dejar pasar. Como siempre suelo decir, uno de los puntos fuertes de las producciones orientales en su norma general es el fuerte arraigo a su idiosincrasia cultural y todo lo que eso significa dentro de una película. Ellos tienen una forma muy particular de manejar los distintos tropos, la retórica, las metáforas, incluso la narrativa y el sentimiento de epicidad. No suele haber grises, es un blanco o negro muy marcado que siempre hay que tener en cuenta.

Y digo esto porque a la hora de construir un héroe y un enemigo, Ajin no utiliza las estructuras clásicas, sino que toma el propio lenguaje del manga. Con esto no estoy diciendo que es una adaptación fiel, sinceramente eso no lo sé porque no he ni leído ni visto las obras originales. Solo me refiero al camino que sigue para ir desasnando a todos los personajes que dicen presente en esta cinta. Siempre rozan el límite sin ser completamente exagerados, pero sí obteniendo un peso específico desde su discurso, sus diálogos y actitudes para que justamente, tengan un carácter más “caricaturesco” que realista, como dije antes, sin exceder los límites del buen gusto y la responsabilidad creativa del sentido común.

Otra review que sí es adaptación de un comic, y es de lo peor que he visto en la materia: Madame Web (2024)

Si dejamos fluir todos estos detalles que vengo mencionando, nos vamos a encontrar a una película con un gran manejo de las escenas de acción. La dinámica, el momentum, la epicidad, hay un montón de herramientas narrativas a nivel visual que se utilizan de forma eficiente y pensando en el espectador que, justamente, busca ver un espectáculo. Disparos, sangre, violencia, golpes, peleas, ciencia ficción, fantasía, todo está aunado de manera impecable por el director y por el editor de esta película. Entre tanto equilibrio, el final pierde un poco de fuerza. Nos prepara mediante todo el metraje para un desenlace de alto impacto, pero no logra tener el factor sorpresa que debería tener. Es un buen final, pero no dista del resto de las escenas de la película.

Técnicamente la cinta se muestra correcta, todas las aristas que conforman a una película las sabe cumplir de forma concisa. Tiene buena cinematografía, está bien filmada, y consta de un buen diseño de producción. Obviamente tiene algunos puntos flojos, sobre todo en lo que refiere a su historia y cómo se construye, conceptos que se dejan de lado o situaciones que quedan en la nada. Incluso podría decir que los efectos especiales que tienen que ver con los fantasmas, dejan un poco que desear. Sin embargo, si la miramos de forma global, no es algo que arruine completamente la experiencia. Sin ser una joya, Ajin nos regala una dosis de buenas peleas, disparos, acción y una creatividad digna del país del sol naciente. No marca un antes y un después, ni destaca, ni se siente única, pero se deja disfrutar.

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